No lo digas...

Demasiado difícil es transcribir como me siento entre tus brazos. Imposible buscar palabras que expresen la dulzura que me provoca compartir esos momentos tan nuestros.

No, no lo digas, exprésalo con tu mirada, con cada beso que imprimas en mi piel, con esa manera tuya de desnudarme, despacio, haciendo que cada vez nuestros cuerpos estén más cercanos, pero dilatando el momento en que nos contemplemos sin ropa…

Disfruto tanto de ti, que no quiero que lo digas, que hay veces que las palabras me asustan, ya lo sabes, así que prefiero tus manos sujetas a mis cumbres, tu tacto, tu miembro erecto abriéndose paso en la cueva de mi satisfacción. Ya veremos… el tiempo al fin y al cabo vuelve efímero todo así que para que decir, yo me siento especial sin que lo digas y llegue junto a ti más lejos de lo que nunca hubiese imaginado así que deleitémonos pues, sin pedir, sin planear, no añadas mas al momento presente pues este momento es único.